Es un trastorno del neurodesarrollo de carácter neurobiológico que se expresa a través de sintomatología desatencional y disejecutiva que interfiere en el correcto desarrollo del individuo. Dependiendo de los ambientes en los que se relaciona el niño, (familiar, escolar, social) los síntomas pueden variar pudiendo ser muy marcados en un entorno y apenas imperceptibles en otro.
Perfil cognitivo
- Dificultades atencionales: distracciones, fatiga a lo largo de las tareas, dejar tareas sin acabar o letras sin poner al final de la palabra.
- Dificultades del procesamiento ejecutivo: en el control inhibitorio que se expresa en interrupciones, para organizar sus deberes, tareas o materiales, para poder estar sentado, para adaptarse a cambios o para regular sus emociones.
Etiología
Se apuesta por una hipótesis multifactorial tal y como verbaliza Lasa-Zulueta “Estamos ante un trastorno de etiología multifactorial compleja con factores relacionados con la genética, el entorno y la biología».
A nivel biológico, gracias a las técnicas de neuroimagen se observa en niños del subtipo hiperactivo afectación en el circuito prefronto-estriado-talamicocortical y reducción en áreas de la corteza prefrontal derecha y del cuerpo calloso.
Respecto a la variable genética, los estudios hasta la fecha muestran que hijos biológicos de padres que padecen TDAH presentan un 50% de probabilidades de sufrir el trastorno.
Comorbilidad
En relación con las investigaciones hasta el momento, un 44% de la población diagnosticada con TDAH padece otro trastorno; un 32% padece otros dos, y un 11% presenta al menos tres trastornos asociados (Szatmari, Offord y Boyle, 1989).
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